jueves, 14 de marzo de 2019

¿Alguna vez han estado con alguien que los contiene o que de alguna forma hace que ustedes no sean como normalmente son? Yo estaba recordando mi última relación y pensaba en todo lo que me quedé guardado, todas las cosas que no dije y que me hubiera gustado decir. Y pensando en eso, me di cuenta de que así fue siempre. No es que él me limitara, más bien lo hacía yo sola, yo me autocensuraba. Nunca he sido muy platicadora, más bien soy reservada, pero con él era excesivamente reservada. Él habla hasta por los codos, y yo sólo escuchaba y asentía. No sé por qué, pero no me atrevía a decir todo lo que estaba pensando, tal vez creía que lo iba a aburrir. Incluso cuando algo me molestaba, tampoco se lo decía, sólo esperaba que se me pasara y después de un rato regresaba como si nada. Seleccionaba con cuidado las cosas que le contaba; a veces, incluso, antes de verlo pensaba en algo que contarle, pero al tenerlo enfrente, ya no lo hacía. Pocas veces fui espontánea. Sigo sin saber por qué fue así. Tal vez su personalidad me abrumaba y no quería decir algo que arruinara todo. No sé, la verdad no lo sé. Sólo estaba reflexionando. Ya sé que debería estar hablando de esto con mi terapeuta, pero quise ponerlo aquí porque a veces escribirlo también nos libera.